
Cuando los contagios de COVID-19 estaban en la etapa inicial, tuve la oportunidad de compartir el concepto de administración de riesgos con algunos emprendedores. El ambiente actual es el ejemplo perfecto de un mundo volátil, incierto, complejo y ambiguo (VICA). Cuando las economías tuvieron que dar prioridad al tema de la salud, los negocios entraron en pausa. Algunos no pudieron volver a operar, y otros tuvieron que reinventarse.
De acuerdo al estudio McKinsey, del 7 de mayo de 2020, las compañías se verán en la necesidad de reentrenar y habilitar a su fuerza laboral para resurgir con fortaleza de la crisis del COVID-19. Algunas de las inversiones en desarrollo humano que se hicieron antes de la pandemia, posiblemente nunca lleguen a producir la rentabilidad que se proyectó, debido a los cambios repentinos en las fuerzas del mercado. Con todo esto, ¿cuánto tiempo les tomará a los emprendedores concentrarse en reconstruir, o crear, negocios que puedan sobrevivir al 2020 y competir nuevamente en el futuro? ¿Imaginaron que existiría la posibilidad de no estar presentes cuando ocurrieran esta reestructuración, reingeniería y giro en sus negocios?
Ahora, los emprendedores se enfrentan con la realidad de los riesgos de salud. Yo les recuerdo que existen otros nueve riesgos a los que están expuestos:
- Demasiada riqueza supone riesgos para quienes no logran reconocer la magia de la diversificación.
- La falta de liquidez incrementa el riesgo de perder oportunidades.
- La pérdida de ingresos puede significar retrasos en el pago de hipotecas.
- Las transiciones en la vida ocurren cuando los niños emigran de la escuela al trabajo. Los emprendedores corren el riesgo de no tener un sucesor.
- Una vida muy larga implica trabajar duro para conservar una buena salud.
- Una vida muy corta implica construir un plan para dejar un legado para que los que se quedan puedan seguir adelante.
- Tener una invalidez significa ser incapaz para trabajar a la máxima capacidad.
- Tener un miembro de la familia enfermo implica un riesgo para las relaciones, pues éstas se ven sometidas a mucho estrés.
- En caso de accidentes, la interrupción laboral puede ser un problema.
Aunque los riesgos están en todos lados, y presentes 24/7, la buena noticia es que existe algo llamado Administración de Riesgos en un mundo VICA. Les muestro a mis prospectos un esquema para la administración de riesgos. Existen cuatro métodos: terminación, tratamiento, tolerancia y transferencia.
Recomiendo la “transferencia”, también conocida como “subcontratación/outsourcing”, porque es una forma más económica de administrar el flujo de efectivo y el negocio en general. Hay empresas especializadas en la gestión de riesgos, y los propietarios pueden subcontratar por una tarifa. Luego entran en el juego los seguros y las compañías aseguradoras.
Después de identificar los riesgos y recomendar una solución, normalmente responden que ya tienen seguros. Yo ya sé que presentarán esta objeción. Los invito a reflexionar en sus pólizas, y les hago estas preguntas:
- ¿Cómo determinaste la cobertura?, ¿empata con tu necesidad?
- ¿Alguna vez has hecho cambios a tu póliza de seguro?
- ¿Cómo elegiste a los beneficiarios?
- ¿Alguna vez has presentado una reclamación?
- ¿Por qué compraste esas pólizas de seguro?
Después de estas indagaciones, casi siempre se dan cuenta de que no cuentan con suficiente suma asegurada, o suficiente cobertura, y entonces tienen la impresión de que yo estoy lista para escuchar. Cuando ayudo a los prospectos a darse cuenta de los riesgos presentes, acceden a hablar de seguros con una menor resistencia y con una mentalidad más abierta.
En un mundo VICA, todos los asesores juegan un rol crucial ofreciendo una perspectiva adicional para todos los empresarios. Los empresarios cuentan con una agudeza mental para crear valor ideando prototipos y pruebas. Hacemos que un mundo VICA sea una ventaja:
- Les ayudamos a manejar la volatilidad con rapidez y claridad.
- Les ayudamos a contrarrestar la incertidumbre con conocimiento.
- Les ayudamos a reaccionar ante la complejidad con soluciones simples.
- Les ayudamos a luchar contra la ambigüedad con adaptabilidad.
Cuando ayudamos a los emprendedores a identificar los riesgos de manera lógica y los mitigamos sistemáticamente, les brindamos las recompensas de la gestión de riesgos.
En la era del COVID-19, los asesores forjan su nombre como defensores vanguardistas del desarrollo económico habilitando a los emprendedores a reconstruir sus negocios con confianza, agilidad y tranquilidad de manera sostenible.

Arlyn Tiong Tan, MBA, FChFP, ha sido miembro de MDRT 14 años. seis veces calificado en Court of the Table y una vez en Top of the Table. Afiliado a Sun Life Filipinas durante 17 años, Tan es un asesor financiero experimentado en las áreas de riesgo, retiro y gestión patrimonial. Sus antecedentes en salud y emprendimiento le permiten proporcionar un valor adicional a las organizaciones y negocios familiares al integrar la planificación de la sucesión en sus planes financieros. Ella es mentora de asesores financieros junior bajo la Unidad Pinnacle y también es la experta a quien acudir en materia de planeación financiera en las organizaciones.